No podía faltar una entrada dedicada al fin del curso, a pesar de las pocas que se han escrito durante
este periodo académico. Esta había que hacerla.
Todos los años
tienen algo de especial, pero este mucho más. Tanto mi hijo como mi hija
superaban una etapa, a la vez que mi propio alumnado. Mi hija obtenía el
Graduado de Secundaria, con buenas notas, en el IES Pablo Neruda de Castilleja de la Cuesta y el próximo
curso empieza su última etapa en Secundaria, el bachillerato, en el IES Alixar,
también de Castilleja de la Cuesta. En este centro, mi hijo a su vez acababa el
Bachillerato, además con matrícula.
En la bonita ceremonia
de Graduación de mi hijo tuvieron a bien pedirme que como representante de los
padres y madres, diera un pequeño discurso dedicado a todos los graduados. He decidido incluirlo. Se lo dedico, además de a mis hijos, a todos vosotros, graduados en
ESO, y especialmente a los que Alonso Rodríguez, un gran alumno, personal y académicamente,
llamo la Piña del 98, durante su propio discurso, en la ceremonia de graduación de
los bachilleres del IES Los Álamos.
La ceremonia fue muy emotiva ya que, además de actuaciones, simpáticos vídeos y estupendas intervenciones de tutores, profesores, alumnos e incluso el alcalde de Bormujos, todos sabíamos que esa piña del 98, ese gran grupo de alumnos y alumnas se iba del centro después de haber pasado 6 años en él. Hemos trabajado, disfrutado, a veces también enfadados, con vosotros, habéis vivido una preciosa etapa, pero ahora viene otra que, ya os iréis dando cuenta, va a ser mejor.
La ceremonia fue muy emotiva ya que, además de actuaciones, simpáticos vídeos y estupendas intervenciones de tutores, profesores, alumnos e incluso el alcalde de Bormujos, todos sabíamos que esa piña del 98, ese gran grupo de alumnos y alumnas se iba del centro después de haber pasado 6 años en él. Hemos trabajado, disfrutado, a veces también enfadados, con vosotros, habéis vivido una preciosa etapa, pero ahora viene otra que, ya os iréis dando cuenta, va a ser mejor.
Bueno os dejo con
el discurso. Cuando me lo pidieron y ante mis dudas de cómo abordarlo, alguien me
dijo que cogiera un par de buenas citas de algún autor ruso desconocido, y a
partir de ahí ya estaba casi todo hecho. No era tan fácil, pero si he utilizado
muchas citas u observaciones de autores no tan desconocidos, intencionadamente adaptadas. Para que os sea más "entretenido" leerlo he subrayado
todas las usadas y podéis intentad averiguar su origen. Ahí va:
Alguien opinó que la mayor parte de las cosas de este mundo son duales. Vivo desde hace mucho tiempo esa dualidad de ser profesor de instituto, no de este, y a la vez padre de alumnado de secundaria, de mi hijo Vidal que este año termina y de mi hija Violeta, que el próximo curso empezará aquí una nueva etapa. He de decir que vivir esas dos caras es una experiencia interesante, y estos dos últimos años más intensa aún por las características del bachillerato. Sin ir más lejos, estas últimas semanas con mi alumnado de 2º de bachillerato ha sido un poco desquiciante pues mientras intentaba transmitir algún interesantísimo concepto de la mejor manera que sé hacerlo, ellos estaban repasando, a escondidas o descaradamente, el examen que tenían horas más tarde, y encima me hacían chantaje emocional recordándome que mi hijo estaba en las mismas circunstancias. El profesor les decía: ¡tenéis que planificaros mejor…o amenazaba sin mucho éxito: "!ya veréis el examen que os voy a poner!" Pero…, y esto lo pensaba el padre, tenían razón, se estaban trabajando la nota hasta el último instante.
Experiencias
como estas seguro las comparto con el profesorado de este centro, al que agradezco,
creo que todos les agradecemos, al igual que al equipo directivo, su
profesionalidad, su esfuerzo, para formar no solo alumnos si no personas, y
todo desde la enseñanza pública, a veces no suficientemente valorada,
actualmente tocada por los efectos de la crisis pero que sigue siendo un factor
de calidad y de igualdad de oportunidades por la dedicación de todos los que trabajan en ella.
Pero
los protagonistas sois vosotros, alumnado de bachillerato. Todas las horas de
estudio, de esfuerzo y dedicación, de atención en clase, de apuntes tomados,
prestados, fotocopiados, de horas robadas al sueño, de repaso del examen en
clase mientras que el estupendo profe de Ciencias de la Tierra explica algo muy
interesante pero al que tú no puedes hacer caso en ese momento, de consultas al
compi, de ruegos a los profes por los pasillos para que revise bien tu examen o los trabajos entregados, también de algunos lloros y de mosqueos,…. todo eso valió
la pena, alcanzaron sus objetivos. Por eso, porque he, hemos comprobado todo lo anterior, estamos contentos, mucho, y sobre todo orgullosos por cada
uno de nuestros hijos e hijas, por todos los compañeros y compañeras del IES
Alixar. Gracias. Muchas gracias. Sabemos que no es fácil.
Sois bachilleres,
jóvenes aspirantes a caballeros según el origen francés de la palabra.
Evidentemente ha quedado claramente desfasada, pero en definitiva ¿a qué
aspiráis? ¿Sabéis lo que sois? Más que hace 2 años seguro, eso creo, pero
no sabéis, todavía, en lo que podéis convertiros.
Y
nosotros los parentales (padres, madres y tutores autorizados) ¿ que esperamos
de ellos? ¿En qué queremos que se conviertan? Porque el tiempo pasó sin
anunciar su prisa. Hace unos pocos años asistíamos a la fiesta de su último
año en primaria, hace menos al de graduación de secundaria, y aquí nos
encontramos, ante su titulación en bachillerato.
“El objeto del
Gobierno es la felicidad de
la Nación”, así decía un artículo de la constitución de 1812, ¡bendita
ingenuidad! Pero nosotros, vuestros padres, en la república independiente de
nuestra casa, siempre lo hemos intentado, vuestro bienestar era nuestro objetivo. Erais nuestro proyecto de
personita, de una nueva persona. Pero hasta hoy. Ese pasado era el prólogo.
El proyecto de persona ya es cada vez más tuyo, bachiller, y menos nuestro.
Ahora abordamos un paso que va mas
allá, que a muchos padres nos inquieta un poco, abandonáis unos caminos
educativos más cercanos, no muy ramificados y ahora aparecen multitud de
posibilidades. Tenéis que elegir. Es verdad que existen condicionantes que van
a eliminar algunas vías, la media obtenida en bachillerato, la selectividad, la
nota de corte, y después condicionantes
económicos, las posibles salidas profesionales y algunos más que irán apareciendo.
En definitiva, visto todos los condicionantes ¿Qué vas a elegir? ¿Dudas? ¿Piensas?
Existes.
Hace tiempo que empezaste a elegir,
por ti mismo, tu ropa, tus amistades, tus gustos culturales y políticos y
muchos ya, incluso su pareja. Generalmente no pudimos intervenir mucho, algunas
pegas o sugerencias de vez en cuando, pero seguimos abiertos a dar nuestra
opinión, aunque educadamente prefiráis obviarla, y siempre lo estaremos,... y si
nos hicierais caso alguna vez sería….increíble! No podemos evitar estar
preocupados por vuestra elección, va a condicionar tu vida a corto plazo y
puede que más, así que te decimos esto: Piensa sobre qué quieres aprender, qué
conocimientos te harán feliz y satisfecho contigo mismo, piensa en lo que
quieres hacer. Has de pensar en qué es lo que te gusta, que te apasiona, en
dotar a tu vida de sentido. Intentar ser feliz, dentro de tus posibilidades, va
a depender cada vez mas de ti.
Seguiremos siendo vuestros padres,
aunque nuestro papel sea cada vez más como un socio capitalista, dentro de los
límites de cada uno, como el de un patrocinador: Proporcionaremos buenos materiales,
techo, ropa limpia y comida, pero lo importante será vuestro propio trabajo y dedicación,
así os lo exigiremos, el peor estudio es el que no se
hace,. Y por favor de vez en
cuando dedicadnos unos abrazos y cariñitos varios
¿Y si te equivocas en la elección? Charles Darwin dijo
aquello de “No es la más fuerte de las
especies la que sobrevive y tampoco la más inteligente. Sobrevive aquella que
más se adapta al cambio”. Pues adáptate, cambia, pero procura acertar esta vez. ¡Y más
abrazos y cariños!.
Para
finalizar, bachilleres, hace muchos años fuisteis los reyes y las reinas de
nuestras casas, no sé cómo estará vuestro status ahora mismo, pero espero que,
a partir de hoy, seáis los héroes de un viaje lleno de aventuras, lleno de
experiencias, que lleguéis a puertos nunca vistos y, parafraseando una de mis
canciones preferidas, podáis sentiros reyes, aunque solo sea un día.
Gracias por vuestra paciencia y Suerte
para todos y todas, pero que os pille haciendo algo provechoso, tenéis un lugar en el mundo por ganar, para hacerlo mejor.